Es la primera vez que pinto flores. Fue una experiencia muy interesante. Observar los colores y las formas de las flores e intentar plasmarlas en la tela no fue nada sencillo. Tengo que confesar que estuve a punto de abandonar el cuadro sin terminarlo. Felizmente mi profesor me dijo que la pintura era así, que no era fácil, que esto me iba a pasar muchas veces y no podía dejarme vencer, tenía que continuar, tenía que luchar. Y le hice caso.
FLORES AMARILLAS - 41 x 33 cm
Óleo sobre lienzo